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viernes, 12 de junio de 2015

UN PASO AL COSTADO

¿Hasta cuándo la delincuencia seguirá tiñendo de sangre las calles?, esta vez, un valeroso policía que trató de frustrar un asalto a una combi en la Carretera Central, en Ate, fue asesinado de dos balazos por parte de un delincuente que se hizo pasar como pasajero.
La ineficacia del actual Ministro del Interior, pone de manifiesto la falta de una estrategia para frenar la ola delictiva que se apodera de nuestras calles.

Los delincuentes han perdido el respeto por la vida de las personas, no les importa matar niños, jóvenes, madres de familias y ancianos para apoderarse del dinero.

Ya no se puede salir a la calle a comer, trabajar, ir al cine, pasear, cobrar su sueldo o comprar algo, porque estamos a merced de estos hampones que esperan el menor descuido para despojarnos del dinero que llevamos.

Una nueva víctima de esta insania delincuencial es el suboficial Luis Giancarlo Suárez Liza (26), quien trabajaba en la comisaría de Huaycán, era un pasajero más de una combi que cubría la ruta Ate - La Victoria y cuando estaban a la altura del kilómetro 9 de la Carretera Central, otro pasajero comenzó a amenazar a todos los que estaban dentro del vehículo para llevarse sus pertenencias.

Cuando el delincuente estaba a punto de bajar de la combi, el policía lo trató de detener y forcejearon por unos segundos. Sin embargo, el hampón sacó una pistola y le propinó dos disparos en el estómago al suboficial antes de escapar con el botín.

La combi trasladó al suboficial Suárez Liza hasta la clínica ubicada cerca de la comisaría de Ate, pero murió por la gravedad sus heridas.

La respuesta que todos los peruanos le hacemos al presidente Ollanta Humala, que espera para poner mano dura y frenar a estos indeseables, que van enlutando hogares, dejando en orfandad a niños y adolescentes.


Hoy fue un policía, mañana puede ser nuestro propio hijo, un familiar o uno mismo, que esperamos, señor Ministro del Interior, si no se siente capaz de organizar un plan para acabar con este flagelo que tanto daño le hace a la sociedad, de un paso al costado y deje entrar a una persona que tenga pantalones y enfrente cara a cara a la delincuencia.